Wednesday, May 30, 2007

New Ideas

Along with the new ideas that are created every day, the other day we were discussing about the idea of making a teletransportation company. The idea is very good and regardless of weather this is possible or not, we started thinking about all physical and moral implications. We came on with few issues:
Given teletransportaion is reading the position and momentum of all the particles in a given boundary that is "you", then.
- The matrix could be sent by email and in the other place a "printer" should create a copy of your self in such place.
- The money is made by selling "ink"
- The same way as electronic files, talking about original and a copy is senseless.
- We have to convince the costumer that we should "recycle" him into "ink".
- The "original", becomes a "copy" once the mail reaches the destination.
- We need lawyers to kindly convince the "original" to "erase" him, or "recycle" the ink.
-Reading and writing should increase entropy, so where is the extra heat in the equation.
- A market for "photoshoping" business of the electronic version of the self could be opened. This is better to license rather than exploit. The philosophy is: We sell the ipod, lets other sell the complements...
-A money could be made even if the "scanner" and the "printer" is not yet done.

Thursday, May 17, 2007

Una hija es un reloj

Si uno lo piensa con cuidado, una hija es como un reloj, te regalan un reloj o mas correctamente: Tu eres el regalado...

Preámbulo a las instrucciones para dar cuerda al reloj

Piensa en esto: cuando te regalan un reloj te regalan un pequeño infierno florido, una cadena de rosas, un calabozo de aire. No te dan solamente el reloj, que los cumplas muy felices y esperamos que te dure porque es de buena marca, suizo con áncora de rubíes; no te regalan solamente ese menudo picapedrero que te atarás a la muñeca y pasearás contigo. Te regalan -no lo saben, lo terrible es que no lo saben-, te regalan un nuevo pedazo frágil y precario de ti mismo, algo que es tuyo pero no es tu cuerpo, que hay que atar a tu cuerpo con su correa como un bracito desesperado colgándose de tu muñeca. Te regalan la necesidad de darle cuerda todos los días, la obligación de darle cuerda para que siga siendo un reloj; te regalan la obsesión de atender a la hora exacta en las vitrinas de las joyerías, en el anuncio por la radio, en el servicio telefónico. Te regalan el miedo de perderlo, de que te lo roben, de que se te caiga al suelo y se rompa. Te regalan su marca, y la seguridad de que es una marca mejor que las otras, te regalan la tendencia de comparar tu reloj con los demás relojes. No te regalan un reloj, tú eres el regalado, a ti te ofrecen para el cumpleaños del reloj.


Instrucciones para dar cuerda al reloj

Allá al fondo está la muerte, pero no tenga miedo. Sujete el reloj con una mano, tome con dos dedos la llave de la cuerda, remóntela suavemente. Ahora se abre otro plazo, los árboles despliegan sus hojas, las barcas corren regatas, el tiempo como un abanico se va llenando de sí mismo y de él brotan el aire, las brisas de la tierra, la sombra de una mujer, el perfume del pan.

¿Qué más quiere, qué más quiere? Átelo pronto a su muñeca, déjelo latir en libertad, imítelo anhelante. El miedo herrumbra las áncoras, cada cosa que pudo alcanzarse y fue olvidada va corroyendo las venas del reloj, gangrenando la fría sangre de sus rubíes. Y allá en el fondo está la muerte si no corremos y llegamos antes y comprendemos que ya no importa.

Julio Cortazar.